Hoy, les cuento que, hablando de las emociones y la expresión de las emociones, y, la relación que se puede establecer, entre un objeto y un ambiente, y la expresión de una emoción, el color naranja, en su estado natural, como cualidad, transmite, evoca y simboliza, la fortaleza, y la decisión. Y, la fortaleza del color naranja, por sí solo, y combinado, con otras cualidades y características de los objetos y los ambientes, como pueden ser la forma, el tamaño y la textura, puede estimular e impulsar a la apertura, la pasión y la creatividad.
En su estado natural, el color naranja, es una cualidad, habitual, entre los seres vivos, principalmente, en las flores. En las flores, el color naranja, se expresa y se manifiesta, en las Caléndulas, la Caña de las Indias, las Dalias, la Gazania, la Rebutia Heliosa, la Rosa de la India, los Farolitos Japoneses, los Platanillos, las Clivias, las Calateas, las Trompetas Chinas, los Castaños de Australia, y los Jazmines Naranja. En los animales, el color naranja, se expresa y se manifiesta, en la Mariposa Monarca, la Tarántula Babuina Naranja, el Pez Payaso (personaje pez de película – «Buscando a Nemo»), el Gallito de las Rocas Guayanés, y el Tigre. Y, en la naturaleza alrededor de nosotros, el color naranja, con sus particulares y sus propios, contenidos y mensajes, muy claros, y muy potentes, de fortaleza y decisión, se expresa y se manifiesta, en gran intensidad y extensión, por ejemplo, en el cielo y una puesta de sol de verano, y, en gran variedad y cantidad, por ejemplo, en los árboles y sus hojas de otoño.
Asimismo, como cualidad y característica, aplicada y utilizada, en el diseño y la creación de los espacios de juego infantiles, el color naranja y sus tonalidades, se pueden exponer en los objetos, como pueden ser los muebles, y los accesorios decorativos, y, en los elementos de los ambientes, en sí mismos, como puede ser, en los pisos, en las paredes, en las puertas, en las ventanas, y en los techos, entre otros; con lo cual, la planificación y el desarrollo de un proyecto de espacios de juego infantiles, que aplique, y utilice, el color naranja y sus tonalidades, está transmitiendo, evocando y simbolizando, contenidos y mensajes, de fortaleza, y decisión, al mismo tiempo que, está estimulando e impulsando, a la apertura, la pasión y la creatividad, a los niños y las niñas, y a los adultos, que participan e interactúan, en el espacio de juego infantil.
En ese sentido, podemos señalar que, la claridad y la potencia, de los contenidos y los mensajes, de fortaleza, y decisión, transmitidos, evocados, y simbolizados, por el color naranja y sus tonalidades, al interior de los espacios de juego infantiles, se relacionan con la combinación del color naranja y sus tonalidades, con las otras cualidades y características, de forma, tamaño, y textura, de los objetos y los elementos de los ambientes, de color naranja y sus tonalidades; con la cantidad, de los objetos y los elementos de los ambientes, de color naranja y sus tonalidades; con las dimensiones, de los objetos y los elementos de los ambientes, de color naranja y sus tonalidades; con los estilos, de los objetos y los elementos de los ambientes, de color naranja y sus tonalidades; y, con las ubicaciones, de los objetos y los elementos de los ambientes, de color naranja y sus tonalidades.
Es así como, hablando de la expresión de las emociones, por el contacto y la interacción, con los objetos y los elementos de los ambientes, de color naranja y sus tonalidades, podemos señalar que, siendo un color cálido, el color naranja, transmite la sensación de cercanía y proximidad. La sensación de cercanía y proximidad, de los colores cálidos, se explica en el hecho que, vistos por nuestros ojos, pareciera que los colores cálidos, como el color naranja, sobresalieran de la superficie de los objetos y los elementos de los ambientes, para acercarse a nosotros. Y, por lo mismo que, la fortaleza y la decisión, del color naranja, se sustenta en su calidez, el color naranja, es un color, naturalmente, interesante y atractivo, para la expresión de las emociones, que, requieren y demandan, nuestra apertura, nuestra pasión, y nuestra creatividad, como, requiere y demanda, la emoción de molestia.
Y, hablando de la expresión de la emoción de molestia, por el contacto y la interacción, con los objetos y los elementos de los ambientes, de color naranja y sus tonalidades, podemos señalar que, la molestia o sensación de enojo que, nos detiene y nos paraliza, por la percepción de un problema, real o imaginario, que tenemos, se alimenta y se nutre de la fortaleza, la decisión, y la calidez del color naranja, que, activa y moviliza, a nuestro organismo. La emoción de la molestia, se expresa, y se manifiesta, como mecanismo de alerta, por la necesidad, y el interés, de protegernos y superar, una situación de crisis o cambio, real o imaginaria. Y, para lograr el reconocimiento, la expresión, y la comunicación de la molestia, niños y niñas, y adultos, podemos, necesitar e interesarnos, en la fortaleza, la decisión, y la calidez, del color naranja y sus tonalidades, aplicadas y utilizadas, en los objetos y los elementos de los ambientes, a nuestro alrededor.
Es entonces que, desde nuestra experiencia y nuestro conocimiento, sobre la influencia del color naranja y sus tonalidades, en nuestra apertura, nuestra pasión, y nuestra creatividad, para lograr expresar la molestia, hoy, les quiero transmitir que, la relación, entre la fortaleza, la decisión, y la calidez del color naranja y sus tonalidades, y la resolución de la sensación de enojo que, manifestamos y expresamos, cuando sentimos molestia, es oportuna y posible. Y que, por lo mismo, corresponde que, nosotros los adultos, en el ejercicio de nuestros roles, como, padres o madres, abuelos o abuelas, tíos o tías, y, maestros o maestras, motivemos, facilitemos, y orientemos, de manera responsable, el contacto y la interacción, de los niños y las niñas, con los objetos y los elementos de los ambientes, de color naranja y sus tonalidades, como, por ejemplo, los cojines.