¡Hola!…¡Buenos Días!…¿Qué tal?. Hoy día viernes 27 de Setiembre, quiero reflexionar con ustedes acerca de cómo canalizamos el agrado ‘en los niños’, particularmente, en espacios y tiempos que nuestros hijos, nietos, sobrinos y alumnos en contacto e interacción con otros niños, adultos o mascotas de la familia o la escuela, reflexionan ‘mágicamente’ sobre ‘la molestia’ ante aquellos hechos o acontecimientos de la vida que ponen a prueba sus hábitos y costumbres.
La molestia se manifiesta y observa en nuestros hijos, nietos, sobrinos y alumnos, como una reacción del cerebro y el corazón, y a causa de hechos o acontecimientos de la vida, inicialmente, ‘incómodos’, que a manera de usos ‘inoportunos’, como la idea de ‘ir a un nuevo oculista’, o, de ‘mudarse de casa’, y de un modo personal y natural ponen a prueba sus hábitos y costumbres personales, con la familia o los amigos, e, incluso, en la escuela, y les producen su intranquilidad e inseguridad emocionales.
En ese sentido, los papás, los abuelos, los tíos y los maestros comprometidos con el cuidado, la crianza y la educación de nuestros niños, podemos canalizar su agrado organizando “‘rutinas’ alentadoras” juntos, en los momentos que estando con otros niños, adultos, e, incluso sus mascotas nuestros hijos, nietos, sobrinos o alumnos, eligen y deciden, reflexionar ‘mágicamente’ sobre sus sensaciones y sentimientos ‘de molestia’ provocados por ‘ir a un nuevo oculista’, o, por ‘mudarse de casa’.
Es así como, cuando hablamos de organizar “rutinas ‘alentadoras’ juntos, estamos hablando de rutinas que ordenan y personifican tareas ‘diarias’ sugeridas para que cada niño con sus actos inspiradores y motivadores logre afrontar las ideas innovadoras, como ‘ir a un nuevo oculista’, o, ‘mudarse de casa’, que como hechos o acontecimientos, inicialmente, ‘incómodos’, para un niño, les suelen provocar sus sensaciones y sentimientos ‘de molestia’.
Ahora, a propósito de la reflexión “¿Cómo canalizamos el agrado ‘en los niños’?” comprendo que las “rutinas ‘alentadoras’”, como personificaciones de “las tareas ‘diarias’ sugeridas”, muestran aquellos actos inspiradores y motivadores que nuestros hijos, nietos, sobrinos y alumnos necesitan y demandan incorporar, para lograr imaginar y crear sus respuestas y soluciones tranquilas y seguras ante hechos o acontecimientos ‘incómodos’ que les causan ‘la molestia’.
Saludos,
Lili Marlene