¡Hola!…¡Buenos Días!…¿Qué tal?. Hoy día martes de 17 de Diciembre quiero reflexionar con ustedes acerca de cómo es que diariamente nuestros niños experimentan “el saber o aprender a ‘hacer’” en sus entornos de aprendizaje familiares y escolares ‘cotidianos’, que como sus espacios o ambientes de conocimiento ‘significativos’, facilitan y favorecen, el desarrollo de sus conocimientos y de sus habilidades prácticas, sociales y emocionales, y la evolución integral de sus personalidades.
“El saber o aprender a ‘hacer’”, como saber o pilar de la educación asociado con el objetivo de aprendizaje de utilizar ‘el conocimiento adquirido’, se experimenta con las ‘pequeñas’ tareas y con los juegos, los juguetes, los materiales, los libros, los videos y las tecnologías, que como recursos de aprendizaje ‘cotidianos’, inspiran y motivan en nuestros niños las ideas, las acciones y los quehaceres que originan sus creaciones y sus producciones.
En ese sentido, el saber o aprender a ‘hacer’ como una experiencia guiada por la necesidad y el deseo de nuestros niños de utilizar ‘el conocimiento adquirido’, tiene un personal y natural componente interno, como es ‘la motivación intrínseca’ o los estímulos internos que conjuntamente con los estímulos externos de sus entornos de aprendizaje familiares y escolares ‘cotidianos’, causan y canalizan, sus creaciones y sus producciones, con la iniciativa de utilizar ‘el conocimiento adquirido’.
Es así como, la curiosidad, la atención y el compromiso que manifiestan y expresan nuestros niños hacia sus ‘pequeñas’ tareas y sus juegos, juguetes, materiales, libros, videos y tecnologías, que inspiran y motivan sus ideas, sus acciones y sus quehaceres, revelan y reflejan, el personal y natural interés de nuestros niños por crear y producir en sus entornos de aprendizaje familiares y escolares ‘cotidianos’, con el ánimo de utilizar ‘el conocimiento adquirido’.
Ahora, a propósito de la reflexión “Nuestros niños y el saber o aprender a ‘hacer’” comprendo que como sus papás, abuelos, tíos y maestros podemos organizar y promover sus ‘pequeñas’ tareas, que a manera de ‘sus aprendizajes significativos’, activan y actualizan, el personal y natural interés de nuestros niños por crear y producir en sus entornos de aprendizaje familiares y escolares ‘cotidianos’, con la curiosidad, la atención y el compromiso de utilizar ‘el conocimiento adquirido’.
Saludos,
Lili Marlene