¡Hola!…¡Buenos Días!…¿Qué tal?. Hoy día martes 26 de Setiembre, quiero contarles y compartirles que, el miedo, como una emoción y un sentimiento cotidiano manifiesto en nuestras experiencias, personales y naturales, produce reacciones diferenciadas en nuestro organismo, como por ejemplo hace que percibamos como si “el corazón corre”, cuando experimentamos ‘algo conocido’ o ‘algo desconocido’, que nos causa el temor, que naturalmente estamos evidenciando y sintiendo, en un momento y un lugar.
En efecto, el miedo, al igual que, la valentía, la tristeza, la felicidad, la molestia y el agrado, es una emoción y un sentimiento cotidiano, que habita dentro de nuestro Corazón, junto con el Amor y la Magia, y produce reacciones o alarmas, que una vez activadas y actualizadas, conjuntamente con el Amor y la Magia que habitan dentro de nuestro Corazón y, los poderes y los superpoderes que habitan dentro de nuestro Cerebro, motivan e incentivan que cada uno despertemos interiormente, a fin que logremos actuar y solucionar ‘ese algo conocido’ o ‘ese algo desconocido’, que nos está causando el temor, que evidenciamos y sentimos, en un momento y un lugar.
El miedo, por propia y particular naturaleza, es una energía positiva que, en el camino espiritual de emociones, actúa como el despertador de nuestros Corazón y Cerebro, pues una vez se enciende, como tal, impulsa y moviliza, el Amor y la Magia, que habitan dentro de nuestro Corazón y, los poderes y los superpoderes que habitan dentro de nuestro Cerebro, en dirección a emociones y sentimientos cotidianos, como son, la valentía, la felicidad y el agrado, cuando tomamos decisiones, afrontamos la vida y, consecuentemente actuamos, dirigidos y orientados, por la iniciativa y la voluntad de solucionar ‘ese algo conocido’ o ‘ese algo desconocido’, que nos está causando el temor, o, en dirección a emociones y sentimientos cotidianos, como son, la tristeza y la molestia, cuando decidimos seguir siendo, dirigidos y orientados, por nuestros temores.
Entonces, en respuesta a: ‘¿qué hacer con “el miedo”?’, personalmente, puedo decir que, independientemente de cuál sea el camino espiritual de emociones, acciones y soluciones, que decidamos elegir, es necesario e importante que, una vez ocurrido ‘ese algo conocido’ o ‘ese algo desconocido’, que nos está causando el miedo y los consecuentes temores, logremos despertar y adoptemos, con libertad y confianza, una actitud de apertura hacia el miedo, evidenciada y sentida, en un: ¡Pasa miedo!.
Ahora, bien, quiero comentarles que, escribiendo los Cuentos Infantiles deLili, encuentro que, en el camino espiritual de emociones experimentado por María José y sus amig@s José María, Josefa, Antonio, Celina y Julio, guiados por Rodo – el caballo y Lali – la yegua, en El Establo Mágico, el miedo y los consecuentes temores, evidenciados y sentidos por los niños, son naturalmente causados por ‘ese algo desconocido’ o ‘ese algo que experimentan por primera vez’, sobre todo estando solos, como ocurre en las historias personales de María José con ‘el sentir miedo’ por el movimiento de su cama, a causa de un eventual temblor de noche, y el miedo, como emoción y sentimiento cotidiano de los niños, dura el tiempo que, regularmente, dura la experiencia, mientras que, los consecuentes temores, perduran en el tiempo en la memoria de los niños; por lo cual, quiero invitarles a trabajar en el ‘¿qué hacer con “el miedo”?’ de los niños, desde el Amor y la Magia, como energías que habitan dentro de su Corazón y, que junto con los sueños, los pensamientos, los abrazos y las sonrisas y, la imaginación y la creatividad, como poderes y superpoderes que habitan dentro de su Cerebro, motivan e incentivan en los niños, las acciones y las soluciones, necesarias e importantes, para su personal y natural manejo de “el miedo y los consecuentes temores”.
Saludos,
Lili Marlene