Educación Emocional,… ¿qué otras formas de decir “te amo” solemos usar?…

¡Hola!…¡Buenas Tardes!…¡Qué tal?. En el artículo anterior hablé sobre, ¿por qué sí decir “un te amo”?, partiendo de dos conceptos clave, como son, el Estrés, comprendido y definido, como la reacción o la respuesta en “lo interno, lo propio y lo esencial” de nuestro cuerpo, ante un desafío o una demanda en “lo personal, lo familiar y lo social” de nuestras relaciones interpersonales, y el Amor, comprendido y definido, como energía y fuerza, buena y positiva, que se activa y se actualiza, toda vez que tomamos decisiones y actuamos armónicamente de acuerdo con aquello que naturalmente queremos, y cuando afrontamos la vida y actuamos equilibradamente de acuerdo con aquello que naturalmente necesitamos. En ese sentido, cuando hablo sobre, ¿por qué sí decir “un te amo”?, puedo decir que, si bien es cierto que, toda vez que tomamos decisiones con armonía y, cuando afrontamos la vida con equilibrio, de acuerdo con aquello que naturalmente queremos y necesitamos, el amor que se activa y se actualiza, es el amor propio, estoy experimentando y aprendiendo que, manifestaciones, personales y naturales, como un te amo, son aquellas expresiones que, desde “lo interno, lo propio y lo esencial”, y en nuestras relaciones interpersonales, motivan e inspiran, nuestro amor propio, y por lo mismo, motivan e inspiran que, en “lo personal, lo familiar y lo social”, tomemos decisiones y afrontemos la vida, armónicamente y equilibradamente, de acuerdo con aquello que naturalmente queremos y necesitamos. Y, asimismo, cuando hablo sobre, ¿por qué sí decir “un te amo”?, comprendo y explico que, un te amo, como manifestación, personal y natural, es una expresión desde “lo interno, lo propio y lo esencial”, que motiva e inspira que, en nuestras relaciones interpersonales, cada uno de nosotros, por el amor propio que sentimos, logremos tomar decisiones, reaccionando y afrontando eventuales sentimientos de miedo, tristeza y molestia, vivenciados y experimentados en “lo personal, lo familiar y lo social”, y por el mismo amor propio que sentimos, logremos afrontar la vida, respondiendo y desarrollando oportunos y posibles sentimientos de valentía, felicidad y agrado, por vivenciar y experimentar en “lo personal, lo familiar y lo social”.

En el artículo actual, entonces, voy a hablar sobre, ¿qué otras formas de decir “te amo” solemos usar?, partiendo de dos conceptos clave, como son, el Estrés, comprendido y definido, como la reacción o la respuesta en “lo interno, lo propio y lo esencial” de nuestro cuerpo, ante un desafío o una demanda en “lo personal, lo familiar y lo social” de nuestras relaciones interpersonales, y el Amor, comprendido y definido, como energía y fuerza, buena y positiva, que se activa y se actualiza, toda vez que tomamos decisiones y actuamos armónicamente de acuerdo con aquello que naturalmente queremos, y cuando afrontamos la vida y actuamos equilibradamente de acuerdo con aquello que naturalmente necesitamos, pues si bien es cierto que, toda vez que tomamos decisiones con armonía y, cuando afrontamos la vida con equilibrio, de acuerdo con aquello que naturalmente queremos y necesitamos, el amor que se activa y se actualiza, es el amor propio, estoy experimentando y aprendiendo que, en la convivencia personal, familiar y social, al interior de nuestros entornos personal, familiar y social, un te amo, como aquella expresión verbal que, desde “lo interno, lo propio y lo esencial”, y en nuestras relaciones interpersonales, motiva e inspira, nuestro amor propio, y por lo mismo, motiva e inspira que, en “lo personal, lo familiar y lo social”, tomemos decisiones y afrontemos la vida, armónicamente y equilibradamente, de acuerdo con aquello que naturalmente queremos y necesitamos, se siente y se evidencia y, consecuentemente, se manifiesta y se expresa, tanto en el plano verbal, como en el plano no verbal, con otras formas de decir “te amo”, como son las manifestaciones y las expresiones no verbales, entre las cuales, podemos reconocer e identificar, los gestos y las actitudes.

De esta manera, cuando hablo sobre, ¿qué otras formas de decir “te amo” solemos usar?, partiendo de dos conceptos clave, como son, el Estrés, comprendido y definido, como la reacción o la respuesta en “lo interno, lo propio y lo esencial” de nuestro cuerpo, ante un desafío o una demanda en “lo personal, lo familiar y lo social” de nuestras relaciones interpersonales, y el Amor, comprendido y definido, como energía y fuerza, buena y positiva, que se activa y se actualiza, toda vez que tomamos decisiones y actuamos armónicamente de acuerdo con aquello que naturalmente queremos, y cuando afrontamos la vida y actuamos equilibradamente de acuerdo con aquello que naturalmente necesitamos, comprendo y explico que, el amor, como energía y fuerza, buena y positiva, que se activa y se actualiza, toda vez que tomamos decisiones y actuamos armónicamente de acuerdo con aquello que naturalmente queremos, y cuando afrontamos la vida y actuamos equilibradamente de acuerdo con aquello que naturalmente necesitamos, se siente y se evidencia y, consecuentemente, se manifiesta y se expresa, tanto en el plano verbal, como en el plano no verbal, con otras formas de decir “te amo”, como son las manifestaciones y las expresiones no verbales, entre las cuales, podemos reconocer e identificar, los gestos y las actitudes, con lo cual, logro comprender y explicar que, el amor, como energía y fuerza, buena y positiva, tiene manifestaciones y expresiones conscientes, como un te amo y, manifestaciones y expresiones no necesariamente conscientes, como suelen ser los gestos y las actitudes.

En tal sentido, experimento y aprendo que, cuando hablo sobre, ¿qué otras formas de decir “te amo” solemos usar?, comprendiendo y explicando que, el amor, como energía y fuerza, buena y positiva, que se activa y se actualiza, toda vez que tomamos decisiones y actuamos armónicamente de acuerdo con aquello que naturalmente queremos, y cuando afrontamos la vida y actuamos equilibradamente de acuerdo con aquello que naturalmente necesitamos, se siente y se evidencia y, consecuentemente, se manifiesta y se expresa, tanto en el plano verbal, como en el plano no verbal, con otras formas de decir “te amo”, como son las manifestaciones y las expresiones no verbales, entre las cuales, podemos reconocer e identificar, los gestos y las actitudes, con lo cual, logro comprender y explicar que, el amor, como energía y fuerza, buena y positiva, tiene manifestaciones y expresiones conscientes, como un te amo y, manifestaciones y expresiones no necesariamente conscientes, como suelen ser los gestos y las actitudes, ocurre que, los gestos, como forma personal y natural de comunicación no verbal, contenida de movimientos corporales visibles, al igual que, un te amo, van a transmitir mensajes buenos y positivos que, en los entornos personal, familiar y social, y de modo personal y natural, van a activar y actualizar, el amor propio en otras personas, motivando e inspirando, vivencias y experiencias de vida, buenas y positivas, como eventualmente son el tomar sus decisiones y el afrontar su vida, con armonía y equilibrio, de acuerdo con aquello que, ellos y ellas, naturalmente, quieren y necesitan.

En tal sentido, también, experimento y aprendo que, cuando hablo sobre, ¿qué otras formas de decir “te amo” solemos usar?, comprendiendo y explicando que, el amor, como energía y fuerza, buena y positiva, que se activa y se actualiza, toda vez que tomamos decisiones y actuamos armónicamente de acuerdo con aquello que naturalmente queremos, y cuando afrontamos la vida y actuamos equilibradamente de acuerdo con aquello que naturalmente necesitamos, se siente y se evidencia y, consecuentemente, se manifiesta y se expresa, tanto en el plano verbal, como en el plano no verbal, con otras formas de decir “te amo”, como son las manifestaciones y las expresiones no verbales, entre las cuales, podemos reconocer e identificar, los gestos y las actitudes, con lo cual, logro comprender y explicar que, el amor, como energía y fuerza, buena y positiva, tiene manifestaciones y expresiones conscientes, como un te amo y, manifestaciones y expresiones no necesariamente conscientes, como suelen ser los gestos y las actitudes, ocurre que, las actitudes, como forma personal y natural de comunicación no verbal, contenida de posturas corporales visibles, al igual que, un te amo, van a transmitir mensajes buenos y positivos que, en los entornos personal, familiar y social, y de modo personal y natural, van a activar y actualizar, el amor propio en otras personas, motivando e inspirando, vivencias y experiencias de vida, buenas y positivas, como eventualmente son el tomar sus decisiones y el afrontar su vida, con armonía y equilibrio, de acuerdo con aquello que, ellos y ellas, naturalmente, quieren y necesitan.

Es así como, cuando hablamos de la comprensión y la regulación de las emociones, en las niñas y los niños, desde una toma de conciencia, sobre su realidad, personal, familiar y social, incluidos, los retos, los cambios y los logros, con el propósito de corregir, resolver, e, incluso, mejorar, un comportamiento y, una eventual actitud, como consecuencia de una adaptación a su realidad, personal, familiar y social, vivenciada y experimentada, con agrado, gusto y placer, en la cual, niños y niñas, vivencian y experimentan, una activación y una actualización, de sus sentimientos de valentía y felicidad, y amor por un@ mism@ y, por l@s demás, estamos hablando de formar, educar y acompañar a las niñas y los niños, en el aprendizaje y la comprensión sobre, el Estrés, comprendido y definido, como la reacción o la respuesta en “lo interno, lo propio y lo esencial” de nuestro cuerpo, ante un desafío o una demanda en “lo personal, lo familiar y lo social” de nuestras relaciones interpersonales, y el Amor, comprendido y definido, como energía y fuerza, buena y positiva, que se activa y se actualiza, toda vez que tomamos decisiones y actuamos armónicamente de acuerdo con aquello que naturalmente queremos, y cuando afrontamos la vida y actuamos equilibradamente de acuerdo con aquello que naturalmente necesitamos, con la finalidad que, los niños y las niñas, con el acompañamiento adulto, comprendan y expliquen que, en su presente y a lo largo de su vida, personal, familiar y social, si bien es cierto que, toda vez que toman decisiones con armonía y, cuando afrontan la vida con equilibrio, de acuerdo con aquello que naturalmente quieren y necesitan, el amor que se activa y se actualiza, es el amor propio, en la convivencia personal, familiar y social, al interior de sus entornos personal, familiar y social, un te amo, como aquella expresión verbal que, desde “lo interno, lo propio y lo esencial”, y en sus relaciones interpersonales, motiva e inspira, su amor propio, y por lo mismo, motiva e inspira que, en “lo personal, lo familiar y lo social”, tomen decisiones y afronten la vida, armónicamente y equilibradamente, de acuerdo con aquello que naturalmente quieren y necesitan, se siente y se evidencia y, consecuentemente, se manifiesta y se expresa, tanto en el plano verbal, como en el plano no verbal, con otras formas de decir “te amo”, como son las manifestaciones y las expresiones no verbales, entre las cuales, pueden reconocer e identificar, los gestos y las actitudes, y aprendan que, el amor, como energía y fuerza, buena y positiva, que se activa y se actualiza, toda vez que toman decisiones y actúan armónicamente de acuerdo con aquello que naturalmente quieren, y cuando afrontan la vida y actúan equilibradamente de acuerdo con aquello que naturalmente necesitan, se siente y se evidencia y, consecuentemente, se manifiesta y se expresa, tanto en el plano verbal, como en el plano no verbal, con otras formas de decir “te amo”, como son las manifestaciones y las expresiones no verbales, entre las cuales, pueden reconocer e identificar, los gestos y las actitudes, con lo cual, logren comprender y explicar que, el amor, como energía y fuerza, buena y positiva, tiene manifestaciones y expresiones conscientes, como un te amo y, manifestaciones y expresiones no necesariamente conscientes, como suelen ser los gestos y las actitudes.

Es entonces que, en mi experiencia y mi conocimiento personal, profesional y laboral como tía y maestra, naturalmente consciente y responsable, por los niños y las niñas de mi entorno, hoy quiero transmitir que, como adultos responsables a cargo de los niños y las niñas, en el rol de padres y madres, abuelos y abuelas, tíos y tías, y, maestros y maestras, es necesario e importante que, reconozcamos e identifiquemos, el significado y el sentido que tienen, los gestos y las actitudes, en el proceso de modelar, formar y educar, el mundo interior de los niños y las niñas, que, natural y habitualmente, manifiestan y expresan, diferentes y diversos, tiempos y momentos, de sensaciones, emociones y sentimientos, conectados entre sí y, conectados con otros, en sus roles, como pueden ser, hijos o hijas, nietos o nietas, sobrinos o sobrinas, o, alumnos o alumnas. Y, en ese mismo sentido, hoy quiero transmitir que, como adultos a cargo de nuestras vidas y, adultos a cargo de la vida de los niños y las niñas, primeramente, durante la niñez, trabajemos en la experiencia y el aprendizaje, personal, emocional y afectivo, de los niños y las niñas, orientado a desarrollar y progresar, en los gestos, como movimientos corporales con mensajes buenos y positivos, y las actitudes, como posturas corporales con mensajes buenos y positivos, en las niñas y los niños, sobre todo en los momentos y los lugares de juego, en los cuales, se originan oportunidades y posibilidades, para el contacto y la interacción, natural, espontánea e innata, con el ambiente, l@scompañer@s y, los materiales de juego, pues tomar decisiones y afrontar la vida, motivados e inspirados, por el amor y sus manifestaciones y expresiones, verbales y no verbales, puede ser muy positivo y favorable, para su crecimiento, su evolución y, sus logros, personales, emocionales y, afectivos, en los grupos de juego.