¡Hola!…¡Buenos Días!…¿Qué tal?. Hoy día viernes 25 de Abril, habiendo reflexionado con ustedes sobre cómo empoderar a nuestros niños con su optimismo, entendido ‘el optimismo’ como ‘una actitud mental’ que motiva, mueve y dispone a nuestros niños a creer en sí mismos y a confiar en las respuestas y soluciones buenas y positivas, posibilitando que cada niño resuelva problemas y tome decisiones, quiero reflexionar con ustedes sobre cómo empoderar a nuestros niños con su paz.
Entendemos ‘la paz’, como ‘un estado de bienestar’ caracterizado por la experiencia y el sentimiento de tranquilidad, seguridad y aceptación que motiva, mueve y dispone a nuestros niños a actuar con amor y a esperar con paciencia en sus vínculos y sus relaciones grupales y colectivas con otros niños, adultos, e, incluso, mascotas de sus familias y escuelas, haciendo posible y oportuno que cada uno de los niños aprendan a convivir, inspirados y motivados, por la tolerancia y el respeto ‘mutuos’.
En ese sentido, ‘la paz’ como ‘un estado de bienestar’ que impulsa y moviliza a nuestros niños a responder y solucionar con calma y serenidad, confiando en sí mismos y en sus entornos, y reconociendo y abrazando los lados positivos y negativos de sí mismos y de los otros, en medida que cada niño siente y percibe equilibrio y armonía por dentro y por fuera, necesita y debe ser validada y valorada con amor y respeto por nosotros, como familias y escuelas comprometidas con su cuidado, crianza y educación.
Es así como, ‘empoderar con su paz’, significa guiar y acompañar a nuestros niños a reconocer, expresar y comunicar ese ‘estado de bienestar’ que los impulsa y los moviliza a actuar con amor y a esperar con paciencia, desde ‘una educación emocional’ que ayuda y apoya a los niños a identificar cuándo sienten la paz en su cuerpo, a aprender cómo usarla de forma positiva y respetuosa, y a saber cómo transformarla en logros creativos y significativos, en beneficio personal y colectivo.
Ahora, a propósito de la reflexión sobre “¿Cómo empoderar con su paz a nuestros niños?” comprendo que empoderamos con su paz a nuestros niños cuando habilitamos y ofrecemos posibilidades y oportunidades de movimiento, juego y creación personales y colectivos, a fin de que cada niño descubra la necesidad y la importancia de cuidarse y cuidar a otros, de pensar antes de actuar, de escucharse y escuchar a otros, de responder con amabilidad, y de solucionar con agrado.
Saludos,
Lili Marlene.
