¡Hola!…¡Buenos Días!…¿Qué tal?. Hoy día martes 16 de Abril, quiero reflexionar con ustedes acerca de cómo es que el aprendizaje emocional, el creer en ‘el otro’ y el confiar en ‘el otro’ se transforman en ‘los poderes interiores’ que en un espacio de apoyo emocional impulsan y movilizan la disposición y la actitud características de desear ayudar a que ‘una persona’ afronte ‘sus estados emocionales’, y logre responder y solucionar ‘su presente’ con la tranquilidad y la seguridad necesarias.
El aprendizaje emocional, el creer en ‘el otro’ y el confiar en ‘el otro’ como ‘poderes interiores’ impulsan y movilizan el intercambio ‘mutuo’ de sensaciones y sentimientos vinculados y asociados a las experiencias emocionales ‘cotidianas’, y el compartir ‘mutuamente’ los mundos interiores, inspirados y motivados por quienes – guiados por su deseo de tomar conciencia y colaborar en la satisfacción de las necesidades manifiestas por ‘el otro’ – dan con sinceridad el apoyo emocional.
En ese sentido, el aprendizaje emocional, el creer en ‘el otro’ y el confiar en ‘el otro’, como fuerzas o energías que estimulan las habilidades de afrontamiento que dan respuesta y solución a los estímulos, las condiciones y las situaciones cotidianos del entorno, y la resiliencia, y promueven la felicidad y la paz desde el reconocimiento, la expresión y la comunicación de sensaciones y sentimientos, facilitan y favorecen el aumento del amor y la fe, y la disminución de la soledad y la incomunicación.
Es así como, el aumento del amor y la fe y la disminución de la soledad y la incomunicación se alcanzan desde un abrazar emociones, un comprender necesidades, un validar puntos de vista y un gestionar eventuales conflictos, inspirados y motivados por quien da con sinceridad ‘el apoyo emocional’ o ayuda a que ‘una persona’ afronte ‘sus estados emocionales’ en su real importancia y con la tranquilidad y la seguridad de responder y solucionar ‘su presente’ de una manera objetiva, efectiva y positiva.
Ahora, a propósito de la reflexión “El apoyo emocional y los poderes interiores”, comprendo que, en un espacio de apoyo emocional, ‘los poderes interiores’, como las fuerzas y las energías que impulsan y movilizan la disposición y la actitud características de quienes en ‘los espacios de apoyo emocional’ muestran la voluntad y el ánimo sinceros de ayudar a que ‘una persona’ afronte con libertad ‘sus estados emocionales’, originan los diálogos ‘sostenidos’ de empatía y solidaridad ‘mutuas’.
Saludos,
Lili Marlene
