¡Buenas Tardes!…¿Cómo están?…¿Qué tal?. En el blog anterior, estuvimos hablando, sobre la gestión de emociones en las niñas y los niños, explicando que, una vez producidas, la fase de percepción emocional y la fase de aplicación emocional, naturalmente, la diferencia, en la administración, la orientación y la organización de las experiencias emocionales, vinculadas y relacionadas, por ejemplo, con emociones como, miedo, valentía, tristeza, felicidad, molestia y agrado, se concreta, en el hecho que, conforme van creciendo y madurando, las niñas, tienen mayor disposición a revelar y hablar, sobre sus emociones, con palabras, mientras que, los niños, tienen mayor disposición a reservar y callar, sobre sus emociones, con silencios, en sus contactos y sus interacciones, con niños y niñas, y con adultos. En ese sentido, como explicamos, en el blog anterior, podemos explicar que, la administración, la orientación y la organización de las experiencias emocionales, se pone en práctica y se ejercita, en la fase de comprensión emocional y la fase de regulación emocional, observándose, puntualmente, en la fase de regulación emocional, en la cual, se da, el manejo y el uso de emociones.
Hablando de, regulación de emociones, en los seres humanos, en general, podemos explicar que, en la regulación emocional o la regulación de emociones, se puede observar, la capacidad del ser humano, para lograr una oportuna y funcional expresión de respuestas emocionales, ante los estímulos y las motivaciones del entorno, físico y social, mediante la puesta en práctica y el ejercicio de estrategias emocionales, cognitivas y conductuales, transmitidas y percibidas, como acciones, actitudes y comportamientos característicos, administrados, orientados y organizados, personalmente, para el manejo y el uso de emociones, en armonía y relación, con objetivos personales, familiares y sociales, en general.
Hablando entonces de, respuestas y estrategias emocionales, ante las experiencias emocionales, vinculadas y relacionadas, con sensaciones, emociones y sentimientos, como pueden ser, miedo, valentía, tristeza, felicidad, molestia y agrado, podemos explicar que, para lograr el buen manejo y, el buen uso de nuestras emociones, en armonía y relación, con nuestros objetivos personales, familiares y sociales, en general, es viable y es recomendable que, pongamos en práctica y ejercitemos, respuestas y estrategias emocionales, como relajación, conciencia del ahora, distracción, comunicación asertiva, plan de solución de problemas, hábitos saludables, estímulos positivos y, actividades distractoras, saludables y positivas, entre otros.
De esta manera, hablando de, regulación de emociones en las niñas y, comunicación asertiva, como una comunicación saludable y positiva, para contactar e interactuar, con el entorno, físico y social, exteriorizando y compartiendo, sensaciones, emociones y sentimientos, podemos explicar que, en las niñas, por su naturaleza, más expresiva y más comunicativa, en comparación con los niños, el uso de la palabra, como complemento del lenguaje corporal, es el medio o el recurso de comunicación, personal, emocional y afectiva, que suelen utilizar, para revelar, manejar y usar sus emociones, en armonía y relación, con sus objetivos personales, familiares y sociales, en general, al interior del hogar y la escuela, por ejemplo.
Asimismo, hablando de, regulación de emociones en los niños y, comunicación asertiva, como una comunicación saludable y positiva, para contactar e interactuar, con el entorno, físico y social, exteriorizando y compartiendo, sensaciones, emociones y sentimientos, podemos explicar que, en los niños, por su naturaleza, menos expresiva y menos comunicativa, en comparación con las niñas, el uso del silencio, como complemento del lenguaje corporal, es el medio o el recurso de comunicación, personal, emocional y afectiva, que suelen utilizar, para reservar, manejar y usar sus emociones, en armonía y relación, con sus objetivos personales, familiares y sociales, en general, al interior del hogar y la escuela, por ejemplo.
En ese sentido, cuando hablamos de regulación de emociones, comunicación asertiva y, manejo y uso de emociones, en los seres humanos, en general, y, en el caso de las niñas y los niños, en particular, en necesario e importante que, como adultos a cargo, responsables del desarrollo y progreso de la educación emocional de los niños y las niñas, como hijos o hijas, nietos o nietas, sobrinos o sobrinas y, alumnos o alumnas, naturalmente, reconozcamos e identifiquemos, el uso de la palabra y el uso del silencio, como medios y recursos, saludables y positivos, para la comunicación, el manejo y el uso de emociones, por parte de, las niñas y los niños, respectivamente, al interior del hogar y la escuela, por ejemplo.
Es entonces que, en mi experiencia y mi conocimiento personal, profesional y laboral como tía y maestra, naturalmente consciente y responsable, por los niños y las niñas de mi entorno, hoy quiero transmitir que, como adultos responsables a cargo de los niños y las niñas, en el rol de padres y madres, abuelos y abuelas, tíos y tías, y, maestros y maestras, es necesario e importante que, reconozcamos e identifiquemos, la necesidad y la importancia que tiene, la regulación de emociones en las niñas y los niños, en el proceso de modelar, formar y educar, el mundo interior de los niños y las niñas, que, natural y habitualmente, manifiestan y expresan, diferentes y diversos, tiempos y momentos, de sensaciones, emociones y sentimientos, conectados entre sí y, conectados con otros, en sus roles, como pueden ser, hijos o hijas, nietos o nietas, sobrinos o sobrinas, o, alumnos o alumnas. Y, en ese mismo sentido, hoy quiero transmitir que, como adultos a cargo de nuestras vidas y, adultos a cargo de la vida de los niños y las niñas, primeramente, durante la niñez, trabajemos en la experiencia y el aprendizaje, personal, emocional y afectivo, de los niños y las niñas, orientado a desarrollar y progresar, en la regulación de emociones en las niñas y los niños, sobre todo en los momentos y los lugares de juego, en los cuales, se originan oportunidades y posibilidades, para el contacto y la interacción, natural, espontánea e innata, con el ambiente, l@s compañer@s y, los materiales de juego, por lo mismo que, la regulación de emociones, es muy necesaria e importante, para su crecimiento, su evolución y, sus logros, personales, emocionales y, afectivos, en el trabajo en equipo y grupo de juego.
