Educación Emocional, …la amistad y el sentido de identidad…

¡Hola!…¿Qué tal?…¿Cómo están?. En el blog anterior, cuando escribimos sobre, creencias y amistad, explicamos que, cuando hablamos de creencias, amistad y, mejores amig@s, lo segundo, para construir y crear, un vínculo o un lazo de amistad, verdadera y duradera, es lograr, desarrollar y progresar, en el sentido de identidad, personal, emocional y afectivo, comprendido como, el vínculo o el lazo, que construimos y creamos, respecto a, una elaboración mental grupal, contenida de creencias y valores, que unen e identifican a un grupo de personas, o, a un grupo de amig@s. El sentido de identidad, se logra, cuando, al interior de un grupo de personas, o, un grupo de amig@s, como pueden ser, por ejemplo, l@s compañer@s, en la escuela, vivenciamos y experimentamos, una relación de participación o pertenencia, positiva o favorable. Y, en tal caso, en la práctica, vivenciar el sentido de identidad, en contacto e interacción, con el grupo de personas, o, con el grupo de amig@s, como pueden ser, l@s compañer@s de la escuela, por ejemplo, motiva e inspira, a que logremos, confianza y, aprobación, positiva o favorable, proyectada en la aceptación y el respeto, mutuos y recíprocos.

Hablando, entonces sobre, la amistad y el sentido de identidad, en lo personal, surge en mi, una primera pregunta, natural, espontánea e innata, como es…¿cuándo sentimos que nos identificamos, o, que tenemos, un vínculo o un lazo, con los valores y las creencias de, un grupo de personas, o, un grupo de amig@s?…y, en mi lectura e investigación, sobre la amistad y el sentido de identidad, encuentro que, construimos y creamos, nuestra identidad personal, como conjunto de características, actitudes, competencias y capacidades, en la niñez, con lo cual, vivenciamos y experimentamos, nuestra identidad social, cuando sentimos correspondencia, entre nuestra identidad personal y, la identidad de un grupo social.

Hablando, entonces sobre, la amistad y el sentido de identidad, en lo personal, surge en mi, una segunda pregunta, natural, espontánea e innata, como es…¿nuestro sentimiento de identidad, o, nuestro vínculo o lazo, con los valores y las creencias de, un grupo de personas, o, un grupo de amig@s…responde a límites de tiempo y/o espacio?…y, en mi lectura e investigación, sobre la amistad y el sentido de identidad, encuentro que, nuestra identidad personal, en correspondencia con, la identidad de un grupo social, como aquella condición interior, que define nuestro ser, y, por la cual, cada uno, nos sentimos nosotros mismos, permanece como un componente constante, independientemente, de lugares y momentos.

Hablando, entonces sobre, la amistad y el sentido de identidad, en lo personal, surge en mi, una tercera pregunta, natural, espontánea e innata, como es…¿cómo suelen ser los grupos de personas, o, los grupos de amig@s, con los cuales, desarrollamos sentimientos, vínculos o lazos, de identidad?…y, en mi lectura e investigación, sobre la amistad y el sentido de identidad, encuentro que, logramos la identidad social, cuando, cada uno, desde nuestra identidad personal, diferenciamos y definimos, nuestro lugar en la sociedad, representada por los grupos sociales, a los cuales, pertenecemos, y, con los cuales, nos identificamos personalmente, porque estamos compartiendo una misma identidad religiosa, cultural, social o política.

Hablando, entonces sobre, la amistad y el sentido de identidad, en lo personal, surge en mi, una cuarta pregunta, natural, espontánea e innata, como es…¿cuáles suelen ser los beneficios de identificarnos, o, tener vínculos o lazos, con los valores y las creencias de, un grupo de personas, o, un grupo de amig@s?…y, en mi lectura e investigación, sobre la amistad y el sentido de identidad, encuentro que, la identidad, como una condición interior y, como un componente constante, construida y creada, al interior de los grupos sociales, en sus dos niveles, como son, la identidad personal y, la identidad social, favorece el desarrollo de la autoestima y, el desarrollo del autorreconocimiento, personal, emocional y afectivo.

Así pues, sobre los conceptos iniciales… amistad y sentido de identidad… la representación o la simbolización, de los cojines de telas, rosadas y celestes, sin y, con diseño, rellenos con perlas de Tecnopor, tiene el propósito y la finalidad de, explicar que, al igual que, las perlas de Tecnopor, integran, son parte y, se unifican al interior de cada cojín, nosotros, conforme con, nuestros valores y creencias, en el día a día y, cada día, naturalmente, conscientes de necesidades e intereses, en común y actuales, integramos, somos parte y, nos unificamos al interior de cada uno de los grupos sociales, siempre, superando límites, construyendo y creando, vínculos o lazos, y, ejercitando y poniendo en práctica, la amistad y el sentido de identidad.

Es entonces que, en mi experiencia y mi conocimiento personal, profesional y laboral como tía y maestra, naturalmente consciente y responsable, por los niños y las niñas de mi entorno, hoy quiero transmitir que, como adultos responsables a cargo de los niños y las niñas, en el rol de padres y madres, abuelos y abuelas, tíos y tías, y, maestros y maestras, es necesario e importante que, reconozcamos e identifiquemos, la necesidad y la importancia que tienen, la amistad y el sentido de identidad, en el proceso de modelar, formar y educar, el mundo interior de los niños y las niñas, que, natural y habitualmente, manifiestan y expresan, diferentes y diversos, tiempos y momentos, de sensaciones, emociones y sentimientos, conectados entre sí y, conectados con otros, en sus roles, como pueden ser, hijos o hijas, nietos o nietas, sobrinos o sobrinas, o, alumnos o alumnas. Y, en ese mismo sentido, hoy quiero transmitir que, como adultos a cargo de nuestras vidas y, adultos a cargo de la vida de los niños y las niñas, primeramente, durante la niñez, trabajemos en la experiencia y el aprendizaje, personal, emocional y afectivo, de los niños y las niñas, orientado a desarrollar y progresar, en la amistad y el sentido de identidad, conforme con sus valores y sus creencias, y, conforme con sus necesidades y sus intereses, en común y actuales, al interior del hogar, la escuela y, la comunidad, en general, por el beneficio significativo que tienen, en el desarrollo de su autoestima y, en el desarrollo de su autorreconocimiento, personal, emocional y afectivo, todo lo cual, facilita que, los niños y las niñas, se integren, sean parte y, se unifiquen, al interior de sus grupos sociales.