¡Hola!…¿Qué tal?…¿Cómo están?. Como meditamos y reflexionamos, en el blog anterior, el lenguaje corporal, acompaña a lenguaje verbal, el cual, suele ser, reconocido e identificado, socialmente, como un lenguaje de mayor necesidad e importancia, con relación a lenguaje corporal. Sin embargo, si bien, el lenguaje verbal, es el lenguaje de nosotros, los seres humanos, con el cual, nos diferenciamos, de otros seres vivos, como pueden ser los animales, por lo mismo que aporta, significado y sentido, a nuestras comunicaciones, e, intercambios interpersonales, de acuerdo con, mi lectura y mi investigación, sobre comunicación, e, intercambio interpersonal, de sensaciones, emociones y sentimientos, mediante lenguaje, verbal y/o corporal, puedo sentir y pensar que, el lenguaje corporal, tiene una igual e, incluso, en algunos momentos, cuando hay silencio verbal, o, cuando hay falta del lenguaje verbal, tiene una mayor necesidad e importancia que, el lenguaje verbal, porque se manifiesta y se expresa, en nuestras actitudes y, comportamientos, siempre, e, independientemente, de nuestra conciencia, voluntad y percepción. El lenguaje corporal, se manifiesta y se expresa, incluso, antes de nuestro nacimiento y, desde el segundo cero de nuestro nacimiento, con lo cual, el lenguaje corporal, pudiera ser reconocido e identificado, como la huella digital, de nuestra personalidad, nuestro temperamento y, nuestro carácter.
Hablando del lenguaje corporal, como el medio móvil, con significado y sentido, para la comunicación y el intercambio interpersonal de sensaciones, emociones y sentimientos, personales y socio – personales, acompañado del lenguaje verbal, manifiesto y expreso, como palabras, orales y/o escritas, desde mi experiencia personal, natural y habitualmente, se vincula y se relaciona, con nuestra capacidad y habilidad, de representar y simbolizar, en gestos, posturas y movimientos, todo aquello que habita, en nuestro interior, que por motivación e inspiración, espiritual y emocional, necesita y es importante, contemos y compartamos, exteriormente, en contacto e interacción, con nuestro entorno socio – personal.
Cuando hablo del lenguaje corporal, como un medio, un instrumento o una herramienta, de comunicación e intercambio interpersonal, de afectos, sentimientos, ideas y/o pensamientos, que tiene el propósito y la finalidad, de contactar nuestro mundo interior, con nuestro mundo exterior, o, con nuestro entorno, estoy hablando que, si bien es cierto como seres humanos, somos creados con la capacidad de expresarnos y comunicarnos verbalmente, los gestos, las posturas y, los movimientos, en la comunicación y el intercambio interpersonal, de sensaciones, emociones y sentimientos, es información inconsciente del organismo, manifiesta y expresa, como indicador involuntario, de nuestro estado espiritual y emocional.
En ese sentido, cuando hablo de nuestro lenguaje corporal, en relación, personal, emocional y afectiva, con nuestro mundo interior y, con nuestro mundo exterior, o, con nuestro entorno, hablo del lenguaje corporal, como un medio, un instrumento, o, una herramienta, proyectores o reflectores, naturales, espontáneos e innatos, de nuestro mundo interior, eventualmente, silenciado, involuntaria o voluntariamente, por reacción de nosotros mismos y/o por acción de nuestro entorno, que manifiestan y expresan, sensaciones, emociones y sentimientos, en momentos y lugares, positivos o favorables, siempre motivados o inspirados, por la experiencia de confianza con alguien, siguiendo la voz del corazón, y/o, la guía de la intuición.
De esta manera, cuando hablamos de proyectar o reflejar nuestro mundo interior, eventualmente, silenciado, voluntaria o involuntariamente, por la participación y/o la intervención de nuestros miedos, nuestras tristezas y/o nuestras molestias, como sensaciones, emociones o sentimientos, con una carga negativa o desfavorable, estamos hablando de, una natural, una espontánea o una innata, imagen de nosotros mismos, construida o creada, sin miedos, sin tristezas y, sin molestias, según somos, según hacemos y según actuamos, por propia y particular, motivación e inspiración, alcanzada y lograda, en forma natural y habitual, con quienes tenemos confianza, mutua y recíproca, nos aceptan y, nos respetan.
Así pues, sobre el concepto inicial… el lenguaje corporal… la representación o la simbolización, de un conjunto ordenado de lápices de, carbón o carboncillo, sobre trazos naturales, espontáneos o innatos, tiene el propósito y la finalidad de, explicar que, al igual que, un lápiz de carbón o carboncillo, tiene infinitas oportunidades y posibilidades de producir trazos, nosotros los seres humanos, tenemos las mismas infinitas, oportunidades y posibilidades, de producir gestos, posturas y movimientos, proyectando y reflejando, en forma positiva o favorable, nuestro mundo interior, eventualmente, silenciado, con la motivación y la inspiración, de liberar, canalizar y sanar, nuestros miedos, tristezas y molestias, naturales y habituales.
Es entonces que, en mi experiencia y mi conocimiento personal, profesional y laboral como tía y maestra, naturalmente consciente y responsable, por los niños y las niñas de mi entorno, hoy quiero transmitir que, como adultos responsables a cargo de los niños y las niñas, en el rol de padres y madres, abuelos y abuelas, tíos y tías, y, maestros y maestras, es necesario e importante que, reconozcamos e identifiquemos, la necesidad y la importancia que tiene, el lenguaje corporal, en el proceso de modelar, formar y educar, el mundo interior de los niños y las niñas, que, natural y habitualmente, manifiestan y expresan, diferentes y diversos, tiempos y momentos, de sensaciones, emociones y sentimientos, conectados entre sí y, conectados con otros, en sus roles, como pueden ser, hijos o hijas, nietos o nietas, sobrinos o sobrinas, o, alumnos o alumnas. Y, en ese mismo sentido, hoy quiero transmitir que, como adultos a cargo de nuestras vidas y, adultos a cargo de la vida de los niños y las niñas, primeramente, durante la niñez, trabajemos en la experiencia y el aprendizaje, personal, emocional y afectivo, de los niños y las niñas, orientado a desarrollar y progresar, en el lenguaje corporal, como un medio, un instrumento, o, una herramienta, proyectores o reflectores, de su mundo interior, eventualmente, silenciado, involuntaria o voluntariamente, para lo cual, es necesario e importante, niños y niñas, tomen conciencia de, las infinitas oportunidades y posibilidades, de producción natural, espontánea e innata, de gestos, posturas y movimientos, que tienen en su vida, como seres humanos, en desarrollo y evolución, continua y permanente, en contacto e interacción, con su exterior o su entorno.